Aunque los registros de puntos de
calor y focos de incendio comenzaron a fines de 2024 y se fueron agravando
durante la primera quincena de enero, será éste próximo fin de semana uno de
los más peligrosos para el fuego desde que comenzó el nuevo año.
Durante los últimos días, bomberos
y brigadistas de toda la provincia trabajan para sofocar entre 30 y 65
incendios cada día. Y las condiciones meteorológicas – similares a las que se
registraron durante la peor temporada de incendios de la provincia en 2022 –
hacen suponer que desde ahora y al menos hasta el mes de febrero los focos
podrían multiplicarse en cantidad y propagarse con velocidad.
"El monitoreo permite
registrar un promedio de 30 a 35 puntos de calor diarios, pero se suman
incendios menores que se detectan y combaten muy rápido y no entran en ese sistema.
Estamos manejando una tasa de 65 incendios diarios dentro de la
provincia", precisó Bruno Lovinson, subdirector de Defensa Civil y
coordinador del Comando Operativo de Emergencias (COE) de la provincia.
"Sobre este próximo fin de
semana tendríamos condiciones casi iguales a las que tuvimos en 2022, respecto
al comportamiento de la meteorología"; advirtió Lovinson. Aunque con
menores índices de sequía que en el verano más complicado para los incendios
sucedidos ese año, las condiciones climáticas serían "casi iguales:
temperaturas que oscilan los 38 grados, baja humedad y viento, a lo que se suma
la cantidad de material combustible acumulado por las lluvias de los últimos
dos años", explicó. "Venimos teniendo más de 10 días de condiciones
extremas en toda la provincia, aunque algunos sectores tienen un poco menos
riesgo, en ningún caso los índices bajan de muy alto", remarcó.
"Nos preocupa mucho, por eso
todos los incendios que detectemos van a ser investigados y se va a dar
intervención a las fiscalías ecológicas", señaló el funcionario, en
sintonía con la advertencia del gobernador Gustavo Valdés realizada hace
algunas semanas, quien determinó un control riguroso y sanciones para quienes
inicien quemas intencionales pese a la prohibición de hacerlo.
En ese sentido, Lovinson reconoció
un alto acatamiento a la prohibición, pero alertó sobre la existencia de
personas que "siguen utilizando esta metodología – de quema de campos -.
Esos son los incendios de mayor dimensión que estamos combatiendo. Hay gente que
no acata, que produce quemas, con condiciones que son muy aptas para la
propagación de muchas hectáreas en pocos minutos. Incluso con la cantidad de
recursos, que se han incrementado entre un 300% o 400% desde 2022, resulta muy
difícil sofocarlos", aseguró el referente.
Así, de dos denuncias ante
fiscalías ambientales realizadas la semana pasada, el número sigue creciendo.
"Las contravenciones van en aumento. Tanto el personal de policía de las
delegaciones del PRIAR, como las Unidades Regionales tienen la consigna de
actuar directamente con multas que son muy elevadas. No hay otra forma. Se está
haciendo un trabajo riguroso en ese sentido", apuntó Lovinson.
Con un panorama que tiende a
empeorar y además se proyecta extendido para febrero, el subdirector de Defensa
Civil remarcó que la labor del personal de COE "trabaja 24 horas con el
análisis de datos y procesamiento de información, a la vez que instó a la
población a alertar, advertir y denunciar focos de incendio a través de los
números gratuitos 100, 103, 105 y 911; así como la aplicación que se puede
descargar en los celulares llamada Alerta Corrientes y el aviso a los controles
en ruta".
Al final, Lovinson también destacó
la ayuda de la población y el soporte de los vecinos a los bomberos y brigadistas
que trabajan en terreno. "Aportan combustible para los móviles, acercan
agua, frutas y caramelos a los cuarteles. Eso es muy destacable",
finalizó.